Comer bien sin sacrificar el sabor
En nuestras vidas diarias, comer bien y sano se acerca cada vez más al fondo de nuestro pozo de prioridades. Sin embargo, esto no significa que tengamos que renunciar al sabor. El equilibrio entre comer bien y con buen sabor no está reñido. Tenemos una amplia variedad de recursos para equilibrar la calidad nutritiva de nuestra dieta a la vez que nos ayudamos a disfrutar de unos sabores ricos. A continuación, citaremos algunos consejos para comer bien sin sacrificar el sabor.
Usa alternativas saludables a la hora de cocinar
La primera medida es tener en cuenta los alimentos que incluimos en nuestra alimentación. Por ejemplo, en lugar de utilizar alimentos procesados podemos optar por algunas alternativas saludables a la hora de cocinar. Esto puede variar desde el uso de una harina integral en lugar de la blanca o una carne magra en lugar de una grasa. Hay un sinfín de soluciones para cocinar de una forma saludable sin renunciar al sabor, es cuestión de encontrar aquellas que nos gustan para combinar la salud, el bienestar y el gusto.
Aprovecha la comida casera
En la mayoría de los casos la comida casera aporta mucho más nutrientes que los alimentos procesados o congelados que abundan en los supermercados. Por ello, es aconsejable que adaptemos lo mejor posible nuestra alimentación a los alimentos frescos y caseros. No hay nada mejor para nuestro cuerpo que una buena comida casera.
Incluye los snacks saludables en tu dieta
Es posible llevar una dieta saludable si incluimos los alimentos más recomendados para nuestra salud. Siempre que se quiera, por ejemplo, untar algo en una pieza de pan, optemos por los snacks saludables como, por ejemplo, el aceite de oliva en lugar de la mantequilla. Estos son buenos componentes para evitar la acumulación de grasa, al mismo tiempo que nos proveen de ese sabor tan saludable.
Agrega alimentos de temporada a tu dieta
El hecho de incluir alimentos de temporada en nuestro menú es otro punto importante para lograr una buena alimentación. Estos alimentos ofrecen un mayor aporte nutritivo y son mucho más ricos desde el punto de vista del sabor. Si les damos la oportunidad a los vegetales de temporada seguro que descubriremos nuevos matices de sabor único.
Incluye frutas a tu recetario
Por último, está la cuestión de incorporar frutas a nuestro recetario. Estos alimentos dan cierta refrescancia a los platos, además de un gran aporte de nutrientes y antioxidantes. Al incluirlas podemos introducir sabores más frutales y refrescantes a nuestra dieta sin renunciar al sabor.
Es esencial conseguir el equilibrio entre las necesidades nutricionales y los sabores ricos, pues así se ahorra tiempo y energía en tareas como la compra de los alimentos y la preparación de la comida. Si se siguen los consejos expuestos anteriormente, podemos alcanzar el equilibrio entre la salud y el sabor sin grandes sacrificios. Según el último informe sobre comida saludable, más del 90 % de los británicos reconoce las bondades de una dieta saludable, siendo esta la mejor declaración de intenciones para convertir los consejos anteriores en buenos hábitos.
¡Buenas! Soy Marina, autora de este blog e incansable “probadora” de dietas (¡qué remedio!). He probado todo tipo de métodos para adelgazar, tanto buenos como malos, y comparto todo lo que sé sobre ellos en este blog.
Tengo 26 años y un hijo, pero la gente me dice que sigue pareciendo que tengo 18. ¿Quieres saber cómo? Te invito a que leas mi historia y lo descubras.
Tabla de contenidos